Por: Jaqueline Muñoz
Fortalecer el Sistema Inmune es mucho más de lo que te han dicho…una mirada desde la perspectiva cuerpo-mente-emoción.
Hemos escuchado de manera regular que algunas enfermedades, alergias y síntomas aparecen ante una baja en las defensas del sistema inmune, pero poco hemos escuchado acerca de cómo funciona, cómo cuidarlo y fortalecerlo más allá de tomar algunas vitaminas o remedios caseros.
El sistema inmune o inmunitario funciona de manera fascinante y compleja, tiene 3 fases fundamentales:
Fase I Reconoce: donde, las células que patrullan el sistema linfático identifican y presentan al antígeno o agente extraño al cuerpo de la enfermedad o virus, otra célula comprueba su identificación como ajena al cuerpo y manda la señal para la generación de Linfocitos y activar el ataque o generación de anticuerpos, a una velocidad de 2000 moléculas por segundo con duración de 5 días aproximadamente para combatir la enfermedad, virus o aparición de células cancerosas.
Fase II Reacciona: donde activa la generación de Leucocitos que atacan a la células de la enfermedad con descargas letales de químicos como interferones, inmunoglobulinas o sustancia de factor de necrosis que destruyen a las células de la enfermedad; o genera anticuerpos para reconocer las células del virus o células cancerosas las destruyen.
Fase III Recuerda: Una vez combatido el antígeno o virus, se genera la memoria inmunitaria. Ante la presencia de un antígeno de enfermedad o virus, una parte de los Leucocitos generados por el sistema inmunitario guardan en su memoria el antígeno o virus, de manera tal que cuando se vuelva a presentar ese virus o enfermedad, lo reconoce rápidamente y lanza un ataque aún más letal que el primero, por 4 a 5 días viajando por la sangre y líquidos corporales o secreciones, de manera que ni siquiera llegamos a presentar síntomas de la enfermedad. El sistema inmune es capaz de producir diez mil millones y hasta 1 billón de anticuerpos.
Por otro lado, en diversos estudios e investigaciones científicas, se ha demostrado que personas que están expuestas al mismo virus con un cuerpo saludable, una de ellas adquiere la enfermedad y la otra no, sosteniendo que es el sistema inmune más fuerte de quien, aún expuesto a un virus o enfermedad, no resulta contagiado.
En estudios recientes se ha dicho que el pensamiento positivo puede fortalecer el sistema inmune, sin embargo, el día de hoy quiero contarte acerca del sistema inmune desde una perspectiva integral, donde cuerpo-mente-emoción fortalecen el sistema inmune, y quiero compartirte mi propia experiencia de cuando me contagie de Covid SARSCov2 en 2020 y lo que hice para sanar.
La mente tiene un poder de crear la realidad en que vivimos, no tenemos defensa alguna ante nuestros propios pensamientos, por eso cuando pensamos que algo terrible podría suceder, comenzamos a sentir angustia y ansiedad; muchas veces creamos en nuestra mente una película de terror de lo que podría pasar si nuestros miedos y preocupaciones se hicieran realidad, y después descubrimos que la situación real fue mucho menos terrorífica o ni siquiera sucedió lo que la mente estaba imaginando, sin embargo, esos pensamientos que gatillaron angustia, el miedo, la ansiedad que sentimos fueron reales, generaron cortisol o adrenalina, hormonas asociadas al estrés que tienen un impacto negativo en nuestra salud y merman la energía disponible en el cuerpo que, al estar expuesto ante un síntoma o enfermedad, no tendrá suficiente fortaleza para combatirlo y caerá en la enfermedad.
Así es como lo viví el año pasado cuando contraje Covid, aún a pesar de vivir con todas las medidas de higiene, tuve un descuido en un supermercado que me expuso al virus, sin embargo, mi cuerpo comenzó a combatirlo, sentí malestares como de resfriado, y esa tarde, además de haber tenido una situación de estrés laboral que me dejó agotada, pase la tarde sin energía y surgió en mi el sentimiento de tristeza por una pérdida reciente y soledad, pensé que si ese resfriado fuera covid tal vez estaría en riesgo mi vida pues hace un par de años tuve un episodio de presión alta, a los dos días perdí el olfato, me hice la prueba y el resultado fue positivo, pasé 5 días críticos con fiebre, presión alta, dolor de cabeza intenso y de cuerpo… y ahí tuve la oportunidad de acudir a todas las herramientas que he aprendido a lo largo de 10 años acerca del manejo de mis emociones y pensamientos, comencé a acechar a mi mente y cada que surgía un pensamiento negativo, derrotista o de miedo ante la enfermedad, inmediatamente cambiaba mi postura corporal, practicaba técnicas de respiración profunda, meditación y nutría el amor propio, además de darme permiso de recibir el amor y cuidado de mi familia, amigos y hasta vecinos que estuvieron pendientes de procurarme víveres, medicinas, tratamientos alternativos, vitaminas, alimentos que fortalecen el sistema inmune. Pude experimentar cómo, alimentar las emociones que curan el alma como la gratitud por la vida, amarme y saberme amada por personas en mi entorno, gente que hizo oración por mi salud, que me escribió, llamó, me mando audios y videos, que me acompañó a la distancia, y aún habiendo estado encerrada 50 días hasta tener una prueba que diera negativo al virus, pude sentir a tanta gente querida tan cerquita de mi corazón. Hoy siento que si esa tarde no hubiera estado bajo tanto estrés, sintiendo tristeza profunda y soledad, no me habría contagiado y se con certeza que las emociones de energía elevada como el amor, la gratitud, la fe, la esperanza y la paz son las que me fortalecieron para que mi cuerpo en 5 días se sintiera nuevamente fortalecido y hoy estar contándote lo que aprendí de esta experiencia.
Asimismo, el sistema inmunitario, bajo estas mismas tres fases funciona a nivel mental y emocional, de manera tal que mi invitación para ti es fortalecer tu sistema inmune en las tres dimensiones que nos constituyen como seres humanos: cuerpo-mente-emoción.
Fase I Reconoce: Identifica y observa constantemente qué pensamientos aparecen en tu mente y qué emociones están siendo gatilladas en ti ante la posibilidad de esta enfermedad o contraer un virus. Sabemos que algunas personas están más desafiadas que otras por tanto tiempo de encierro, desesperadas por no poder salir a realizar sus actividades regulares, o no poder reunirse con sus seres amados.
Fase II Reacciona: Al darte cuenta si tus pensamientos apoyan la presencia de la enfermedad o incluso se esta creando una historia de terror en tu mente como por ejemplo, “de esta no voy a salir” “ya valió” “me voy a morir” entonces estás fortaleciendo el impacto del virus o enfermedad en tu cuerpo y puedes, al darte cuenta, elegir pensamientos que fortalezcan el sistema inmune como por ejemplo “si sigo el tratamiento adecuado pronto estaré sano de nuevo” “este virus no me matará” “soy suficientemente sano para pasar por esta enfermedad sin morir” “tengo fe o esperanza que estaré sano muy pronto” “este virus o enfermedad no es bienvenido en mi cuerpo y mi sistema inmune lo destruirá”, etc., cualquier pensamiento que te llene de sentido, cualquier meta o propósito que te conecte con las ganas de seguir vivo y sentirte vivo, incluso puede declarar lo que harás cuando estés sano nuevamente, visualizarte sano y realizando tus actividades favoritas.
Fase III Recuerda: Recuerda que auto observarte todos los días para reconocer en qué pensamientos anda tu mente, aprende a reconocer las emociones que estás sintiendo y cómo expresarlas adecuadamente y dominarlas, escucha a tu cuerpo y activamente nútrelo con actividades que elevan la energía como la alimentación saludable, el ejercicio, la hidratación y respiración profunda de manera tal, que tu cuerpo pase mayor tiempo en relajación que en tensión, que elijas alimentar tu mente con pensamientos positivos y conectar con las emociones que sanan el alma.
Así, cuando aceche un virus o enfermedad, tu sistema inmune se encuentre fortalecido, alimentando tu cuerpo, tu mente y tus emociones de manera positiva … que ningún virus o enfermedad encuentre en tu cuerpo un lugar para quedarse, que tus risas los ahuyenten, que tu amor los reconozca y elimine de tu sistema, que tus pensamientos anulen cualquier impacto negativo, y con esto no quiero decir que no acudas al médico, a mi me atendió el médico amigo de la familia a distancia. El sistema inmune, como su nombre lo dice es un sistema, que requiere cuidarse desde todas sus dimensiones, a nivel emocional, mental y corporal.
Te invito a aprender más acerca de cómo mantener un equilibrio saludable de tu cuerpo-mente-emoción en los programas de @LisenEducation.
Manda un WhatsApp diciendo que leíste este artículo y recibe un ejercicio en audio que fortalece cuerpo-mente-emoción a través de reconectar con tu poder personal de elección y sanación.
¡Te deseo salud y bienestar!
Qué es coaching (Parte 1)
¿Qué es Coaching? (Parte 1) Hace unos días, en un grupo privado de Facebook que cuenta con casi 100 mil miembros y que está relacionado